Actualizado 21 enero, 2019
Las botas no solo son un corolario o culminación del look, sino una forma de adquirir elegancia; parte del atuendo sumamente importante. Aquí te presentamos vestidos con botines, las mejores combinaciones.
Vestidos largos con botas
La unión de vestidos largos y botas, de diversa clase, es seguramente algo que se pondrá de moda (incluso en ambientes de verano, por ejemplo, como la playa. A continuación te presentamos vestidos largos con botas, además de mucha información al respecto.
La longitud de la pieza de vestido con la bota es una combinación arriesgada, pero sumamente preciosa. Decimos arriesgado porque siempre existe el desafío de que la apariencia pase de ser sumamente estilizada a tener una apariencia absolutamente aplanada. Para evitar semejante realidad los accesorios, el estampado y colores del vestido, incluso sus terminaciones si es largo van a cumplir un papel esencial.
Este look monocromático, tanto en la bota como en el vestido, dan un alargamiento del aspecto; pero no se pierde una bella composición que se puede tener en cuenta.
Siguiendo con la línea monocromática, una buena variante para no dar un aspecto aplanado son las terminaciones del vestido, con puntas desalineadas que, por ende, dejan al descubierto a las mismas botas.
La bota larga va muy bien tanto en el vestido corto, como en el largo, sobre todo si las terminaciones son abiertas y permiten otorgar, con mucha sensualidad, una visual no solo de la bota propiamente dicha sino también de la pierna de la mujer. Que el vestido sea colorido o más tenue no modifica la elegancia.
La bota, sobre todo si es corta, puede ser no solo una elección para un día típico de otoño o invierno, sino también para algunos más calurosos, ya que estas combinaciones con vestidos suelen ser sumamente frescas.
Si quieres un look más desenfadado entonces puedes tener en cuenta pequeñas botas, con calcetines, vestidos monocromático, accesorios como pulseras o collares, además de una camisa por sobre el vestido propiamente dicho.
Este vestido queda muy bien con botas largas y de taco, ya que es irregular en sus terminaciones, con un estampado entretenido y colores muy favorecedores.
Aquí tenemos otro vestido lo bastante suelto, largo, con utilización de pulseras y botas pequeñas. Estas clases de botas no quedan mal tampoco en los clásicos vestidos a medida o pegados al cuerpo.
Vestidos cortos con botas
Los vestidos cortos con botas es también una opción bella que aporta sensualidad y, sin embargo, no deja de lado la elegancia y frescura. Se puede usar tanto en días invernales como en aquellos en los que hay un poco más de calor.
El vestido corto con la bota prolongada da un efecto de delgadez y estilización estupendo. De hecho, es un look muy pretendido por las mujeres bajas, ya que genera un efecto de mayor altura.
Beige, gris y negro da lugar a una suerte de aspecto sumamente elegante. Se puede usar de manera nocturna, pero seguramente será mucho más apreciado por su misma tonalidad en horas diurnas.
Vestido sumamente fresco, con manga corta, corte regular abajo a la altura de los muslos y botas es muy buscado también por la finura y elegancia que aportan. Es una hermosa propuesta para la jornada diurna, aunque con una campera o chaleco puede ser también utilizado en temperaturas algo más bajas.
Un vestido corto con botas igualmente cortas (cubren apenas los tobillos) es una excelente opción para demostrar la hermosa de las piernas. Asimismo, como las piernas son claramente visibles da una sensación de alargamiento ideal para las de pequeña estatura.
El azul marino, los grises y el negro son tonalidades invernales (también otoñales) que quedan muy bien. Aquí tenemos un vestido largo, con una falda estilo trompeta que otorga sensualidad y botas largas.
El cinto o cinturón no solo es un detalle bonito, un accesorio que entalla la cintura, sino también una forma de romper con el aplanamiento de la visual tanto en vestidos largos como también en cortos.
Las botas largas otorgan un estilizar que queda muy bonito, también en tonalidad oscura o poco colorida como el resto del vestido.
Botas cortas, estilo Doc Martens, muy bellas en combinación con un vestido florido, pero sobrio. Tranquilamente, en una jornada algo fresca, se puede usar un abrigo.
Vestidos con botas de caña alta
Lo que suele decirse la altura del tubo de estos modelos puede variar un poco: estar algo debajo de la rodilla, sobre o incluso sobrepasarla. Tanto para pequeñas como, sobre todo, para las muchachas altas, el riesgo será una visual demasiado aplanada. A continuación te presentamos vestidos con botas de caña alta.
El aporte del abrigo ajustado para día invernal queda muy hermoso. Otra vez vemos como el color negro es muy pretendido para la época otoñal-invernal.
El cinturón en la imagen aporta una armonía entre el vestido la bota, que sin embargo no sobrepasa las rodillas. El vestido tiene mangas que ocupan 3/4 del brazo, las pulseras y las gafan otorgan un aspecto retro bonito.
Aquí tenemos una bota de caña alta, valga la redundancia, sumamente alta, a tal punto que casi se tocan con el vestido colorido suelto (recuerda a una media pantalón). Una hermosa forma de vestirse que seguramente será tendencia en estos meses.
El sombrero de fieltro también queda muy bien en conjunción con el vestido (aquí de manga larga) y las botas de caña larga oscuras, por encima de las rodillas.
Las botas largas y un vestido con estampa floran otorgan mucha frescura.
Las botas grises son más diurnas y aportan un aspecto outfit delicado.
Cualquier clase de abrigo sirve para romper un excesivo estilizar en los vestidos.
La combinación de los colores grises del vestido y el oscuro de la bota de caña alta da un buen efecto.
Vestidos con botas de caño corto
La bota de caño corto es una buena opción, ya que por lo general resulta más cómoda en su utilización. Asimismo, estiliza a las pequeñas, no tanto por la estructura de la bota (ya que son cortas), sino porque pueden generar el efecto de un continuo con las mismas piernas y vestido. Te dejamos imágenes de vestidos con botas de caño corto.
Un vestido floral corto, con una bota corta y oscuras. Se ve que el efecto de frescura, no deja de lado u obstaculiza lo que es el oscuro del look restante.
Las botas cortas y las piernas al descubierto dan un efecto muy bonito para estilizar, sobre todo a las mujeres que son bajitas.
Estas botas de gamuza con cordones quedan muy lindas si quieres romper un poco con lo normal en los meses venideros. Lo vivo del vestido, asimismo, da un aporte de frescura, pero también ayuda a transmitir algo de fuerza.
Este vestido estilo pantalón vaquero queda muy bien en unión a unas botas cortas, con una totalidad éstas cercanas al color piel que da una continuidad entre la bota y el resto de la pierna.
Si quieres tener estilo y agregar algo distinto a tu aspecto o visual oscura son estas botas cortas de animal print.
El look moderno de este estilo de grises y amarillo se ve profundizado por las gafas.
Otro ejemplo de botas cortas color piel que ayudan a no generar un corte con las piernas y estilizan. El vestido blanco aporta pureza y frescura; una combinación para tener en cuenta en un buen día de otro o directamente en verano.
Lindo contraste generado entre bota con taco corta y una chaqueta abrigada y voluminosa.
Vestidos con bota montaría y botas texanas
Los estilos de montaría, es decir, de bota sin salto y sobre todo de caña alta, además del texano (con bordados y pico más fino), suelen ser tenido muy en cuenta para combinar con los vestidos por las mujeres. A continuación te presentamos vestidos con bota de montaría y botas texanas.
El negro otorga estilo y como estas botas de montaría son largas, también aporta una gran elegancia y sobriedad (se deja ver mucho de las piernas).
Versión sin salto prácticamente de color marrón con un lindo abrigo de invierno.
Como se ve en la imagen de arriba, es un look que sirve perfectamente en invierno o ciertos días de otoño, porque combina muy bien con vestidos abrigados.
El toque del collar viene muy bien para romper con la prolongación, a veces excesiva, del vestido.
Hace rato que las botas texanas no solo son para vaqueros y las mujeres también la pueden utilizar. Los detalles del cuero y los arreglos que tiene el vestido van muy bien con ese estilo de bota.
Aquí tenemos un vestido de encaje negro y unas botas texanas. Si bien la relación entre ambas prácticamente no existe, un tercer objeto como la cartera termina sirviendo de conexión.
Un vestido suelto y claro queda muy bello en combinación con estas botas de vaquero de tubo largo (casi hasta la rodilla).
El vestido chemise estilo jean y la bota más corta de vaquero quedan muy bellos, ayudado por el cinturón y la cartera en tonalidad con las botas.